sábado, 31 de octubre de 2009

BOTNIA: URUGUAY DENUNCIÓ QUE LA ARGENTINA FALSEÓ DATOS EN LA HAYA



Por: Guillermo Pellegrino

La interminable puja por la pastera finlandesa Botnia que enfrenta a la Argentina y Uruguay volvió a sacudir a la diplomacia de los dos países. Es que ayer la Dirección de Medio Ambiente del Uruguay (DINAMA) dio a conocer un informe en el cual acusa a la delegación argentina de haber manipulado y modificado datos en las presentaciones que el Gobierno argentino realizó ante la Corte de Justicia de La Haya.

Según el organismo uruguayo, que elaboró el explosivo informe, "Argentina recurrió a afirmaciones contradictorias con la realidad, a sesgar y manipular datos, a la adulteración de documentos e inclusive a infringir el reglamento de la propia Corte".

El texto habla de que el Gobierno argentino denunció que los datos interpuestos por Uruguay en sus alegatos no eran confiables. Sin embargo, agrega, "cuando le tocó exponer en una de las audiencias", usó algunos de ellos "de manera muy particular". El informe asegura que la Argentina, a partir de datos de la uruguaya Obras Sanitarias del Estado (OSE), afirmó en uno de sus alegatos que los efluentes de Botnia habían dañado la calidad del río y violaban los límites que fija la Comisión Administradora del Río Uruguay para el parámetro "oxígeno disuelto".

"Los datos utilizados eran de 'oxidabilidad' y no de 'oxígeno disuelto', que es casi lo contrario", advirtió la directora de la DINAMA, Alicia Torres. "Lo primero refiere a la cantidad de materia orgánica presente en el agua, mientras el oxígeno disuelto es fundamental para que exista vida en el río y cuanto más haya, mejor".


Un monitoreo múltiple y permanente

"Botnia no contamina". La conclusión es de siete organismos de control que estudiaron el tema sobre agua, aire, radiogeoquímicos y de fito y zooplancton. Por la papelera, el río Uruguay es el sitio más monitoreado del mundo. Más allá de la polémica y de los cruces entre los gobiernos de Argentina y Uruguay, los estudios fueron realizados por organismos estatales y no gubernamentales. A saber:

La Dirección Nacional de Medio Ambiente uruguaya (DINAMA). Comenzó el monitoreo en 2003 y cuando la planta se puso en funcionamiento pasó a presidir la "Comisión de Seguimiento de la planta de celulosa, puerto y zona franca de Botnia", integrada por organismos oficiales, la empresa y ONGs. Esta comisión tuvo 13 reuniones y dijo que la planta no impacta negativamente.

El Laboratorio Tecnológico del Uruguay (LATU). Elabora, desde abril de 2005, análisis microbiológicos. Hizo 37 reportes. En ninguno se encontró señales de contaminación.

La consultora canadiense Ecometrix, por pedido del Banco Mundial, ha elaborado ya dos informes, dentro de un plan de cuatro, y ha descartado cualquier posibilidad de contaminación.

Green Cross, la ONG dirigida por el ex presidente ruso Mijail Gorbachov, también monitorea a la pastera. Sus primeros dos informes, de 2008, descartaron cualquier contaminación.

El Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI)
también aseguró que hicieron estudios de la calidad de las aguas del río Uruguay que por ahora no arrojaron pruebas de contaminación y que seguirán monitoreando.

La Secretaría de Ambiente encargó tres informes. Uno de ellos a la UBA, que no detectó ninguna señal de alarma.

Lo mismo ocurrió con los informes encargados a la Universidad de La Plata, realizados en el Laboratorio de Espectrometría de Masas de Alta Resolución.

Botnia también realiza un monitoreo constante. Un informe dio niveles de contaminación aun menores a los que se observaron, por ejemplo, en Suecia y Finlandia.


Clarín, 31-10-09